Los castaños de indias son árboles de rápido crecimiento que pueden alcanzar alturas de hasta 30 metros (100 pies). Con el cuidado adecuado, se sabe que estos árboles sobreviven hasta 300 años. Entonces, ¿qué se necesita para mantener sano un castaño de indias? ¿Necesitas podar un castaño de indias? La siguiente información sobre la poda del castaño de indias discute los pros y los contras de la poda de los castaños de indias y cómo podarlos.
El castaño de indias (Aesculus hippocastanum) es un árbol caducifolio no nativo cuyo nombre se deriva de la marca que queda en las ramas después de que el follaje ha caído, que se parece mucho a un herradura invertida. Estéticamente, el árbol es conocido por sus grandes flores blancas. Estos dan paso a los «erizos», grandes castañas cubiertas de espinas marrones.
El castaño de indias no crea brotes que requieran mantenimiento en forma de poda agresiva. Esto significa que podar el castaño de indias es solo eso, una poda ligera. Sin embargo, hay algunas excepciones.
La poda del castaño de indias puede ser necesaria para eliminar las ramas enfermas o dañadas. La poda también se puede hacer, cuando el árbol es joven, para mejorar el flujo de aire y la penetración de luz. Esto significa eliminar cualquier cruce, ramas abarrotadas y bajas.
Los árboles maduros deben dejarse solos tanto como sea posible, con la excepción de eliminar las ramas dañadas o enfermas. Este árbol es propenso a varias enfermedades, y la poda abre la posibilidad de transmisión.
Antes de abordar un trabajo de poda en un castaño de indias, considere la oportunidad. Hay buenos y malos momentos para podar este árbol en particular. Una regla general es evitar la poda de castaños a principios de primavera a mediados de verano y finales de verano a mediados de invierno. Los mejores momentos para podar este espécimen son desde mediados de invierno hasta principios de primavera o desde mediados de primavera hasta mediados de verano.
Antes de podar este árbol, considere lo que espera lograr. Si desea retrasar su altura, sería mejor podar cuando el árbol haya perdido sus hojas en el otoño hasta mediados del invierno. Se puede realizar un recorte muy mínimo en cualquier época del año.
Los principales proyectos de poda deberían llevarse a cabo mejor por personal cualificado, tanto por el gran tamaño del árbol como por si inclinación hacia la enfermedad.